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Implicaciones para los derechos de las mujeres del «Proyecto de Ley para la igualdad de las personas trans y la garantía de los derechos LGTBI»

El pasado 1 de febrero de 2023, Women’s Declaration International España trasladamos mediante una carta al Senado nuestra preocupación por el contenido de la llamada “Ley Trans” y pedimos a los y las senadoras el voto negativo para evitar la aprobación de dicha Ley.

Publicamos a continuación el escrito remitido en su integridad:

1 de febrero de 2023

Ilmo. Sr. Senador / Ilma. Sra. Senadora:

Women’s Declaration International España es la delegación española de la campaña Women’s Declaration International, con sede en Reino Unido. Nuestra organización es creadora y divulgadora de la Declaración de los Derechos de la Mujer Basados en el Sexo, que cuenta con más de 30.000 firmantes en más de 160 países, y que reafirma los derechos de la mujer basados en el sexo que se recogen en la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (CEDAW) adoptada por la Asamblea General de Naciones Unidas el 18 de diciembre de 1979. Le recordamos que, tras haber sido ratificada por el Estado español en 1983, la CEDAW es parte del ordenamiento jurídico español desde su publicación en el BOE en 1984. 

Como organización feminista no podemos estar más preocupadas por la aprobación de la llamada “Ley Trans” para la cual se pide su voto favorable, porque el fondo de la cuestión es grave. Estamos hablando de una ley que contiene algo realmente trascendente: permitirá la autodeterminación del sexo registral según la subjetividad y criterio personal de cada individuo. O sea, con su aprobación, la “Ley Trans” redefinirá el término ‘mujer’ como categoría biológica y, lo que más nos preocupa, jurídicamente. 

Si cualquier hombre se autoproclama mujer y puede hacer efectivo su deseo sin la lógica restricción de su cuerpo sexuado, ¿en qué quedarán las leyes específicas que se han creado para proteger y defender a las mujeres, como es el caso de la LIVG? ¿En qué quedarán las estadísticas que analizan la brecha salarial entre sexos, desfavorable a las mujeres? ¿En qué quedarán los análisis clínicos y médicos, cuyos resultados van a verse desvirtuados e invalidados? ¿Y con la atención a la maternidad y las cuestiones relativas a la reproducción femenina? ¿Qué sucederá con las categorías deportivas femeninas si varones autoidentificados mujeres empiezan a  competir en  ellas? ¿Qué pasará con la paridad en las listas electorales? ¿Cómo se explicará la reproducción humana en la universidad y en la escuela si con estas leyes se invalida la ciencia? ¿Ya no podrá haber asociaciones de mujeres en exclusiva, como las de víctimas de violencia machista? ¿Las mujeres lesbianas tendrán que agruparse con hombres que se identifiquen como mujeres bajo pena de multa? ¿Correrá peligro la libertad de expresión de las mujeres si dicen que un hombre no puede ser mujer o que los hombres no pueden ser lesbianas? 
 

Llevamos tiempo haciendo campaña para divulgar las nefastas consecuencias de las políticas basadas en la ideología de la identidad de género en todas las áreas públicas concernientes a la ciudadanía española. De hecho, como seguramente bien sabe, estas políticas ya se están aplicando en la mayoría de comunidades autónomas que, desde 2014, fueron aprobando leyes trans sin conocimiento ni debate social (nos consta que ni siquiera las políticas y políticos de las autonomías conocían los textos a fondo, o tenían una visión superficial de estos). No hablamos, por tanto, de “posibles” consecuencias, sino de consecuencias vistas: agresores machistas que se autodeterminan como mujeres tras el delito, son encarcelados en prisiones de mujeres (Canarias); agresores que cambian su sexo registral antes del delito, cuyas víctimas no pueden acogerse a la LIVG (Cataluña); colegios que piden al profesorado que vigile a niños y niñas que no cumplen con los estereotipos sexistas y les hable sobre la posibilidad de que sean trans (Valencia). 

Precisamente estas son las preocupaciones y peligros de los que alertó al Gobierno británico la Relatora Especial de Naciones Unidas sobre la Violencia contra las mujeres y niñas, sus causas y consecuencias, Reem Alsalem, en su carta del 29 de noviembre de 2022, cuya traducción enlazamos, por lo que desde WDI España nos pusimos en contacto con ella para poner en su conocimiento que en España se estaba realizando la misma propuesta normativa que en Escocia.

Ser mujer no es una identidad o un sentimiento, es un hecho material. Falsearlo jurídicamente solo puede acarrearnos más problemas a los que ya arrastramos. Las mujeres asesinadas por hombres en España en 2022, no fueron víctimas de violencia misógina porque se autopercibían como mujeres o se sentían femeninas, sino porque eran seres humanos de sexo mujer.
 

Por esta razón le pedimos que dé su voto negativo para evitar la aprobación de la “Ley Trans”, la cual debió debatirse en el Congreso de las Diputadas y Diputados habiéndose dado a conocer mucho antes a la ciudadanía española. Esta ley, que afecta todos los ámbitos de la vida ciudadana, no solo carece de consenso social, sino del necesario conocimiento y aprobación ciudadanas. Un gobierno capaz de aprobar leyes de esta manera adolecería de lo que distingue a una Democracia de otro tipo de regímenes políticos.
 

Con la esperanza de que se incline a favor de los derechos humanos de las mujeres,

Cordialmente,

Women’s Declaration International España